El humor se me viene y se me vá

Llevo muchas días sin entrar, cuestión de humor, no tenía humor para entrar. En este tiempo han pasado muchas cosas, como siempre, ha comenzado la campaña electoral y los debates televisivos de candidatos. Pero voy a hablar de otra cosa. Ayer leí en un periódico atrasado, que en Cuba el gobierno limita y controla el acceso a internet a los cubanos. En los hoteles venden tarjetas a los turistas y clientes (a 8 euros media hora en un país donde el sueldo medio es de 15 euros al mes) los empresarios, como siempre, ayudando; pero tienen prohibido vendérselas a los cubanos (a los que tengan dinero). Resulta algo increíble, sobre todo para los que vivimos en regímenes democráticos, que podemos criticar (el régimen y a los políticos). El peligro de la libertad de expresión, el peligro de la palabra, ¡qué miedo! es muy duro que alguien te critique cuando estás en el poder "divino". ¿Cómo se puede criticar algo que ha otorgado el todopoderoso creador? Nosotros ya ni nos acordamos de cuando en España era así, cuando todo era subversivo, cuando el Estado nos "protegía" de nosotros mismos. Lo peor de todo es que no tiene remedio. Es como en Corea del Norte, dónde se mueren de hambre (cuando lo de las vacas locas el presidente norcoreano, pedía a Europa que les dieran todas las vacas contaminadas, que preferían morir de la enfermedad, que era a largo plazo que de hambre, que era inminente), sin embargo tienen para bombas atómicas. No tenía humor para escribir entradas, pero se me va a quitar del todo... que cabrones.