sábado, 27 de abril de 2013

Bangladesh y los mercados esos

Una fábrica textil en Bangladesh, en un edificio en ruinas y con más de mil empleados-esclavos que trabajan 15 horas diarias (declaradas) por 30€ al mes (que es el precio mínimo en temporada de una sola prenda que podemos adquirir a esas marcas punteras), para hacer competitivo un negocio que hace al "amo" el hombre más rico del mundo (o el tercero); se hunde (la fábrica digo) y mueren 200 personas o más y otro montón de heridos. Los mercados (esos a los que parece que les debemos la vida, que velan por todos nosotros) andan muy preocupados por la salud y la vida de esos trabajadores-esclavos que trabajan 15 horas diarias, o más por 30€ al mes o menos, que hacen ricos a los más ricos... ¿o será por los arriesgados accionistas?... si va a ser eso.
No sólo es en Bangladesh, es en Pakistán, en Vietnam, en Tailandia, en Laos, en Indonesia y en otros muchos países que se enriquecen explotando personas que parecen no tener derechos humanos mínimos. De camino arruinan al nuestro deseando que con el tiempo también nosotros trabajemos 15 horas al día, o más por 30€ al mes, o menos y no tengan esas empresas que pagar esos fletes de barcos desde tan lejos, que no están los tiempos para derrochar beneficios... que cabrones.

viernes, 26 de abril de 2013

Pidamos dinero

En España hay muchos parados, un montón, los políticos siempre prometen que acabarán con el paro, se comprometen a algo que está fuera de su alcance, lo dicen sólo para conseguir votos y con ellos su "trabajo". Luego, hay dos soluciones posibles al paro: hacerse político y prometer cosas imposibles que te den muchos votos o dejar de pedir trabajo. Yo pienso que pedir trabajo es cosa de bobos, nadie que esté trabajando habla bien de su trabajo, lo que quiere es descansar o jubilarse. Lo que habría que pedir, directamente, es dinero. Lo mejor es ser rico: se te acaban los problemas, es cuestión de elegir bien el paraíso fiscal donde colocarlo. Pedir trabajo es de tontos, yo quiero dinero, directamente y que sigan trabajando los políticos... es lo que les gusta.